Cómo sobrevivir siendo Biólog@ en una ciudad, sin sucumbir en la banqueta esperando...

viernes, febrero 26, 2010

Inspiraciones

Me parece que pocas cosas creadas por el humano, son enteramente originales. Miren si no...

El plumero...
El tamal... (¡un árbol de amate!)

La chispa de chocolate...

Las eólicas...

Fotos: Jardín Etnobotánico de Cuernavaca, Mor.
Mariana B.

jueves, febrero 18, 2010

De paseo entre asclepias

El biólogo Xerófilo y yo salimos de tour fotográfico virtual. Tan virtual que él no lo sabe. Pero el objetivo era fotografiar unas flores extrañas que a mí me causan mucho interés. Será por sus colores y su forma (parecen una doble flor), pero también por su toxicidad. ¿Se puede ser tan bellamente malo? Tal vez no son del todo malas. Tienen químicos que son ingeridos por las orugas de las mariposas monarcas. Al realizar éstas su metamorforsis, esas sustancias son transportadas a las alas. Si algún ave intenta tragarlas, las escupirá antes de que mueran (las mariposas y ellos), pues las monarcas les provocan asfixia.
A fin de cuentas, nadie sabe para quién trabaja. Ahí está la bella asclepia de climas cálidos, con su aparición efímera y expuesta a los mordiscos de las orugas monarcas.


No estoy segura de que esa de ahí arriba sea una oruga de monarca, es muy probable, se parece pero no me convence.

He ahí la razón del por qué me parecen una doble flor. una es amarilla y la otra anaranjada de manera invertida. O como una flor amarilla con falda naranja.


Las semillas son muy parecidas a las que presenta Xerófilo en sus fotos. Sólo que estas fueron capturadas en Puxtla, Morelos. Son plantas que no superan el metro, sus flores son realmente pequeñas (escasos 2cm) y veces se les encuentra en potreros, en la orilla de caminos y en cualquier otro lugar lleno de hierbas que parecen poco interesantes. Sólo es cuestión de ser más curiosos y descubrir lo que nos rodea y casi pisamos.
Y como las fotos de Xerófilo son de tierras áridas, a él sí le dio tiempo de mostrar el ciclo de vida completo... jeje.

sábado, diciembre 26, 2009

Compensación
Existe el ver, el mirar y el observar...



y existe vida aquí, allá y más acá...

jueves, julio 23, 2009

De tu arte a MI ARte prefiero...

He retrasado este escrito durante mucho tiempo, la verdad es que no sé cómo empezarlo. Tenía el título aún antes de pensar en escribir y las fotos otorgadas por mi madre. Pero bueno, ahí va:

Confieso que soy (cuasi)bióloga, no artista. No me dedico a la apreciación del arte, ni a su crítica, ni a su hechura. Me gusta conocer creaciones de las distintas "artes" y en ocasiones las encuentro realmente admirables y bellas. A veces uno se topa con otras no tan agradables, pero siempre se ha dicho que el arte es subjetivo y como tal, habrá gente que lo aprecie y gente que lo deteste.

Un buen día (pongámonos idílicos), caminaba por la banqueta disfrutando del bello día soleado y del bello trinar de las aves cantoras que reposaban sobre bellos árboles de bellas jardineras en las que revoloteaban bellas mariposas cuando a lo lejos vislumbré una HORRENDA mole que recubre al bello Museo del Chopo.


Desde hace años este Museo, que pertenece a la UNAM, está en remodelación pero no en inactivación. Se ha dado a la tarea de realizar exposiciones como ellos llaman de "el museo fuera del museo" y por mucho tiempo expuso un graaaaan graffiti a lo largo de toda su barda. Que a decir verdad no es su barda, sino una "tapia" de madera que pusieron a modo de recubrimiento sobre sus rejas de hierro con esto de la remodelación. Y bueno, tampoco era una belleza ese dibujo pero al menos tenía cierto estilo interesante.

Pero volvamos a la mole. Ahora el Museo expone sobre esa misma fachada de tablas "Un rio de plástico", nombrado así por su merísimo autor Héctor de Anda. Desconozco la trayectoria del autor (la verdad es que por salud biliar tampoco quiero investigar) así que todo lo escrito aquí va dirigido únicamente a esta exposición.

Es entendible que al autor le preocupe "la contaminación ambiental por desechos plásticos" y también apruebo que quiera hacer una llamada de atención y crítica a la humanidad por la irresponsabilidad de los productores y los consumidores de los plásticos. Eso me parece muy bien. Pero también entiendo que existen formas de hacer estas denuncias y si el autor forma parte de un círculo social que tiene potencial ingerencia en los medios de comunicación, entonces podría realmente hacer algo con resultados mucho más productivos.

La introducción de la exposición, que también está escrita sobre las mismas tablas, dice que "Un Río de plástico es una propuesta estética formal que consuma a gran escala (90m de largo, 3m de alto, 40cm de espesor) los planteamientos del mismo autor...". Tuve que buscar la definición de estética en el DRAE porque dudé mucho de lo que yo conocía como estética, pero ahí les va lo que dice: Armonía y apariencia agradable a la vista, que tiene alguien o algo desde el punto de vista de la belleza. --- (no andaba tan equivocada, tal vez otros sí).



Dicen los medios escritos que hicieron el reportaje de la exposición, que el autor se dedicó a recolectar de los vecinos (muy entusiastas, por cierto) las bolsas de plástico que utilizó para su "obra". ¿En serio que fue de los vecinos? A UNA cuadra del museo todavía nos consideramos vecinos y aquí nunca vinieron a pedir ninguna bolsa. La dichosa obra estética es una bola de bolsas de plástico rellenas de (¡¡adivinen!!) más bolsas. Las "Bolsas de bolsas" están PINTADAS en negro y rojo. Sí señores, LAS PINTÓ con aerosol. No se puso a pedirle a los vecinos sus bolsas rojas y negras, nonono. Es más, tengo la impresión de que esas Bolsas de bolsas son todas del mismo tamaño y se encuentran en las mismas buenas condiciones. O sea, ¡LAS COMPRÓ! (o se las donaron entusiastamente en estado NUEVO).


A la fecha de hoy, dicha exposición se encuentra en estado aún más deplorable. Las bolsas de bolsas se están desprendiendo de sus grapitas con las que las fijó a láminas (igualmente pintadas con aerosol) y vomitan su relleno de más bolsas hacia la banqueta. También se puede observar cómo las bolsas sirven para poner la basura de los transeúntes, pero no se hagan ilusiones, que ésta también termina en el piso. Y por si fueran pocos los 90m de largo, al autor se le ocurrió ¡¿por qué no?! forrar de bolsas plásticas el teléfono público que está enfrente del museo. Lo que no se le ocurrió es que llegaría algún vandalillo a prenderle fuego seguramente mientras esperaba a que la novia le contestara el teléfono. Menos mal que sólo fue en el teléfono... ¿qué tal que le entraba un ocio mayor y le prendía fuego a los 90m con todo y cafetería en el camino?

Hay una frase muy cierta: LA BASURA GENERA MÁS BASURA. Y si quiso despertar alguna conciencia ecológica el querido Héctor de Anda, pues lo hizo, aunque no creo que sea lo que esperaba.
Sólo espero que llegue el día en que quiten esa exposición que hace aún más triste la situación que vive el museo, la colonia y la ciudad. ¡Quéjense, están en su derecho!


lunes, julio 20, 2009

La danza de las libélulas



"Y en una danza sutil, libélulas de jardín cruzarán el cielo de tus sentimientos..."
Cancioncita de Manuel García.
Fotos chopeadas.

miércoles, junio 03, 2009

¡¡¡CONTROL!!!... biológico



En el mundo natural existen animales asociados a cierto tipo de vegetación ya sea para su alimentación, anidamiento, hospedaje como en casos de parasitismo y otros. A estas relaciones le podemos llamar "interacciones interespecíficas (planta-animal)".

Lo más común es pensar en algunos insectos y otros herbívoros de tallas más grandes comiéndose a las plantas. Esto sucede porque existe una cadena alimentaria y afortunademente el mundo es muy verde aún y soporta cierto número de depredadores sin que esto represente un riesgo en las poblaciones vegetales, es decir, tiene una "capacidad de carga". Este número de habitantes comelones es regulado por diferentes mecanismos, principalmente por un control biológico (alguien más arriba de su nivel en la cadena trófica).
Sin embargo, este equilibrio no siempre se conserva. A veces la balanza de la naturaleza está a favor de unos y es cuando ocurren la invasión de las plagas.

Estos de aquí son unos insectitos bastante molestones que han decidido ¿por qué no? vivir y degustar de la savia de mi planta de café. Se llaman áfidos y creo que les dicen también pulgones. Yo los llamaría gandallitas verdes del demonio. Aparecieron sin ser invitados y sin llamar a la puerta, un día ya estaban ahí invadiendo todos los tallos y las hojas nuevas, queriendo pasar desapercibidos con su color verde limón tal como el de los renuevos. Hice un preparado mágico-orgánico para combatirlos: chile, café, tabaco, ajo y cebolla hervidos y después les rocié el agua. No funcionó del todo la magia, eliminó a algunos pero la cubierta de queratina que tienen los insectos es como un escudo protector.

Recordé entonces a las catarinas. ¡Cómo deseaba tener un ejército de ellas! Insecto plaga VS insecto depredador es lo que necesitaba. Algunas veces en mi infancia, colectabábamos mi hermana y yo a las catarinas del jardín. Las colocábamos en botes con hojitas para que se alimentaran. Yo solía abrir los botes para espiar lo que hacían y en mi memoria no está verlas comer. Ellas no se comían las hojas, quién sabe por qué.
Años... muuuchos años después aprendí en la facultad (jajaja) que las catarinas son unas terribles depredadoras de áfidos. Fue que entendí por qué nunca se comieron los platillos vegetarianos que les ofrecíamos de pequeñas.

Unos días después del intento fallido de eliminar a los áfidos de mi cafeto, encontré una catarina que luchaba por su vida tratando de deshacerse de una telaraña de mi ventana. ¡¡Era ella a quien yo necesitaba y una araña quería quitármela!! Por supuesto la rescaté y le presenté su nuevo hogar para dejarla hacer lo suyo...

Es así como se ha dedicado saborear los dulces áfidos molestos.

¿Apoco no es genial? Sin plaguicidas químicos que contaminen, he aquí su labor en el sistema.

Por ahora sólo estamos en busca de pareja catarinosa, para conseguir el ejército. Se aceptan donaciones. ¿Se han dado cuenta de que ya no hay catarinas en los jardines como antes?

domingo, abril 26, 2009

Hierbas de bichos

Existen plantas con nombres comunes alusivos a animales como el epazote zorrillo (Chenopodium foetidum), oreja de burro (Echeveria sp.), ojo de tecolote (Merremia dissecta), lagaña de perro (Plumbago pulchella), mano de león (Geranium seemannii), hierba del piojo (Lobelia cardinales), flor de puerco (Dugesia mexicana) (ahora tan de moda el buen marranito), caña de jabalí (Costus mexicanus), cabeza de guajolote (Smilax lancelolata), ala de murciélago (Passiflora coriacea) y las diferentes colas entre ellas la de caballo (Equisetum sp.), sólo por mencionar algunas cuyos nombres parecen ser parte de recetas mágicas.

Y es que aparte del nombre, muchas de las plantas que están a nuestro alrededor han sido utilizadas para remedios físicos, morales y de amores. Es así como podemos encontrar estas plantas con nuestros hierberitos de confianza o en la jardinera del vecino. La mayoría de estas plantas medicinales provienen de lugares insospechados, de climas diferentes a los nuestros, de tierras lejanas o de difícil acceso. Me gusta imaginar que algunas personas se dedican a extraerlas y se meten en el monte con todo y burro, buscan la plantita, cortan un poco y luego la venden. Claro, suponiendo que hacen un aprovechamiento adecuado. Soy de la idea de que conservar no significa "no tocar", sino saber aprovechar.

Todo esto viene a colación para presentarles una plantita muy peculiar: La cola de caballo.

Conocida en el medio hierbero por sus propiedades diuréticas para padecimientos del riñón y de vías urinarias es una herbácea (o sea que no tiene un tronco leñoso) que crece en pequeñas colonias a orillas de ríos. Su forma de crecimiento es casi única, existe otra que se le parece pero tiene flores rojas y su nombre científico hasta se parece: Russelia equisetiformis; o sea que es una ruselia con forma de equisetum pero na'que ver porque la Cola de caballo no tiene flores sino una estructura reproductiva llamada estróbilo en la punta de su tronco principal. Además tiene una disposición radial de sus ramas secundarias que podrían parecerse a las hojas de los pinos, pero no, les digo que son ramas. Y estas ramas tienen hojas chiquititas, mejor llamadas micrófilas, observen las rayitas negras en las fotos.
Y después de tanta teoría, les dejo lo mejor: fotos de ejemplares vivos, pues me pareció que en la manera que los venden ya secos, rotos y desmembrados, no se aprecia su belleza rara.


Fotos: Ejemplares de Equisetum hyemale en el jardín Botánico Clavijero. Xal., Ver.
Nombres científicos y comunes sacados de: Herbario Medicinal del Instituto Mexicano del Seguro Social. Información Etnobotánica. Aguilar, A., J.R. Camacho, S. Chino, P. Jácquez, M.E. López. IMSS. México 1994. 253 pp.
PD: HAGO MI TOTAL Y ABIERTO PANCHO POR LA CANCELACIÓN DEL DÍA NACIONAL DEL JARDÍN BOTÁNICO (25 de abril) EN EL DEFEÑO VIRULENTO. ¡¡GRRRR!!

viernes, abril 10, 2009

El náufrago



... o suicida.